Mira este mundo burbujeante y delicioso. El scoby es el corazón del kombucha. Es posible que lo encuentres en esa masa fermentada que tienes en el refrigerador o en un frasco en casa. Parece extraño. Este organismo vivo es responsable de convertir el té endulzado en la bebida gaseosa y ácida que todos amamos. El artículo con forma de panqueque se sentirá como un viejo amigo de la familia una vez que lo domines, recursos extra.
El acrónimo de scoby significa cultivo simbiótico de bacterias y levaduras. Aquí está el comienzo. Imagina una comunidad de bacterias y levaduras realizando un baile. Las bacterias lanzarán su hechizo mientras la levadura consume el azúcar. El té se vuelve más brillante y más ácido.
Hablemos ahora del aroma. Es posible que el olor que percibas en tu cocina tan pronto como comiences a preparar kombucha sea distintivo. Algunas personas pueden arrugar la nariz. Otras lo comparan con la sidra. ¡Espera! Serás recompensado por tu paciencia. Aunque el resultado no sea el que quieres, igual será agradable.
¿Alguna vez te preguntaste por qué a los scobys se les suele llamar “madres”? El hecho es que los scobys dan vida a sus crías, al igual que las madres. Si tu kombucha está lista, es posible que notes una “madre scoby flotando”. Puedes observar el ciclo de vida en tu propia casa, lo que da lugar a nuevas y deliciosas tandas.
Es fácil hacer tu propia kombucha. Es un proceso sencillo que requiere paciencia, azúcar y té, así como un poco de scoby. Una vez que todo esté listo, tapa el frasco con un paño limpio. Debe colocarse en un lugar cálido (pero no demasiado caliente). Ahora puedes esperar. Mientras la mezcla actúa, mantente ocupado. Mira tu programa de televisión favorito o haz algunas galletas. Sin delicias sabrosas, ¿qué sentido tiene la vida?
El éxito de la kombucha se debe en gran medida a su equilibrio entre dulce y ácido. Cada tanda tiene un sabor diferente. Puedes añadir unas rodajas de lima, un poco de jengibre o un poco de albahaca a la mezcla para darle un toque herbal. Tu cocina se puede convertir en un laboratorio sin gafas ni guantes.
Los scobys requieren poco mantenimiento. No es necesario pasearlos, pero sí necesitan algo de comodidad. Evita dejarlos morir de hambre o ahogarlos con té hirviendo. El scoby preparará kombucha sabrosa si está contento. Es mejor empezar de nuevo si aparece moho. No es buena idea tener invitados imprevistos.
¿Qué te parece una nueva versión? ¿Qué te parece regalarle un scoby a alguien? Son geniales para los amigos que quieren fermentar o como sorpresa en un evento. Entonces puedes guiñarles el ojo y decirles: “Aquí hay una pequeña mancha”. Nunca se sabe. Nunca se sabe.
La infusión de kombucha produce una carbonatación natural. A veces, las botellas pueden explotar. El kombucha sabe mejor cuando lo abres. Es mejor abrir las botellas lentamente para evitar que se derrame. No quieres un desastre antes de tu taza de café de la mañana.
Será un viaje increíble, amigos. Arriésgate. Arriésgate. El éxito se logra mejor con bebidas gaseosas. Scoby, una encantadora criatura que parece un extraterrestre, es la mejor manera de alcanzar el éxito.